Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales


Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales

El Impuesto de Transmisiones Patrimoniales es un tributo complejo vigente en España. Se trata de un impuesto complejo porque grava diferentes hechos imponibles, por lo que en ocasiones la doctrina lo divide en tres impuestos diferentes:

  • Transmisiones patrimoniales.
  • Actos jurídicos documentados.
  • Operaciones societarias.

Cada uno de estos impuestos grava un hecho imponible completamente distinto. El impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales grava todas aquellas transmisiones de bienes a título oneroso que no se encuentran gravados por el impuesto sobre el Valor Añadido. Sin embargo, el impuesto sobre los actos jurídicos documentados es un impuesto que grava la formalización de determinados documentos notariales, mercantiles y administrativos en territorio español o en el extranjero que surtan efectos en España.

Por su parte, el impuesto sobre operaciones societarias grava la constitución, aumento y disminución de capital, fusión, escisión y disolución de sociedades, las aportaciones que efectúen los socios para reponer pérdidas sociales y el traslado a España de la sede de dirección efectiva o del domicilio social de una sociedad.

El Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, más conocido como ITP, es un tributo indirecto que grava tres hechos imponibles distintos: las transmisiones patrimoniales onerosas, las operaciones societarias y los actos jurídicos documentados.

Dicho de forma más sencilla este impuesto grava la compra de un coche o vivienda de segunda mano y también el alquiler; la ampliación o reducción de capital en las empresas, así como los actos jurídicos, como la escritura pública de compraventa de una vivienda o la escritura de formalización de una hipoteca.

Impuesto de Transmisiones Patrimoniales para vivienda

Como hemos comentado, el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales afecta a operaciones como la compraventa o el alquiler de viviendas. El sujeto pasivo, es decir, quien está obligado a pagarlo, es la persona que adquiere el uso del bien: el comprador en el caso de una compraventa de viviendas y el arrendatario en el caso del alquiler.

Cuándo, cómo y dónde se paga el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales

El ITP es un impuesto estatal que está cedido a las comunidades autónomas, por lo que se abona en la delegación de Hacienda de la comunidad correspondiente. El plazo para liquidarlo es de 30 días a partir del momento en el que se produce la compra del bien o la firma del derecho.

Calcular tu cuota de Impuesto de Transmisiones Patrimoniales

Para calcular el ITP, hay que tomar como base imponible el valor del bien transmitido o del derecho constituido para saber la cuota tributaria a pagar. Esta cuota varía en cada comunidad autónoma ya que son las que fijan el tipo de gravamen, las deducciones y bonificaciones y la gestión y liquidación del impuesto.

Qué operaciones grava el ITP

Como hemos señalado, el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales grava tres operaciones distintas:

  • Transmisiones patrimoniales onerosas: Son aquellas en las que se transmite un bien a título oneroso pero no se paga el IVA. En el caso de la compra de vivienda, se paga ITP cuando se compra de segunda mano entre particulares. Estas transmisiones tributan entre un 4 % y un 10 % dependiendo de la comunidad autónoma y de las deducciones que se apliquen.
  • Operaciones societarias: Relacionadas con la constitución, aumento o disminución del capital, o la fusión, escisión o disolución de sociedades, también se consideran como hechos imponibles las aportaciones realizadas por los socios para reponer pérdidas sociales. En estas operaciones el impuesto es de un 1 % aproximadamente.
  • Actos jurídicos documentados: Se refiere a los documentos notariales, mercantiles o administrativos que se formalizan dentro de España, y los que se realicen en el extranjero pero que surtan efecto en España. Este impuesto es también diferente en cada comunidad autónoma, oscilando en una franja entre el 0,5 % y el 1,5 %.

Cómo se calcula el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales

El cálculo del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales varía en función de la operación que grava. Principalmente, lo que cambia es el tipo al que se gravará la operación, aunque también la base imponible. Además, como es un impuesto competencia de las comunidades autónomas, también cambia según dónde esté situado el bien.

Cálculo del ITP en la compraventa de una vivienda

El Impuesto de Transmisiones Patrimoniales solo se aplica en la compra de una vivienda de segunda mano entre particulares, mientras que la compra de vivienda nueva está gravada con el IVA. En este caso, el comprador es quien paga el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, mientras que el vendedor abona el IRPF por la ganancia patrimonial obtenida con la venta.

En el cálculo del impuesto hay que tener en cuenta dónde está situada la vivienda. Por ejemplo, a una vivienda ubicada en la comunidad de Madrid vendida por 100.000 € se aplica un ITP del 6 % (6000 €) pero si se la compra una familia numerosa se aplica un tipo del 4 % (4000 €). Sin embargo, si la vivienda está situada en la comunidad valenciana, por el mismo precio de venta el comprador debería pagar un 10 % (10.000 €) de ITP, aunque puede haber reducciones en algunos supuestos.

Cálculo del ITP en el alquiler de una casa

Cuando se trata de una vivienda en alquiler, el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales solo se paga una vez cuando se firma el contrato de alquiler. Para obtener la base imponible sobre la que se aplica el impuesto se toma en consideración la renta mensual y la duración del contrato. Por ejemplo, una renta de 600 € mensuales por 3 años de duración del contrato da como resultado una base imponible de 21.600 €. A esta cantidad se aplica la tarifa correspondiente de cada comunidad autónoma.