¿Para qué se usa la información de los datos catastrales?
La finalidad originaria del catastro es de carácter tributario, proporcionando la información necesaria para la gestión, recaudación y control de diversas figuras impositivas por las Administraciones estatal, autonómica y local. A estos efectos, el Catastro proporciona el censo de bienes inmuebles, su titularidad y el valor catastral que es un valor administrativo correspondiente a cada inmueble y que hace posible que pueda calcularse la capacidad económica de su titular.
Además de la función tributaria, en los últimos años se han incrementado la demanda de información catastral por parte de Administraciones, ciudadanos y empresas. En este ámbito cabe citar el servicio de descarga masiva de información catastral, que pone gratuitamente a disposición de empresas y particulares la información catastral, incluyendo la posibilidad de su reutilización.
Dentro de los usos fiscales de los datos catastrales están:
- IBI
- Impuesto Municipal sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana
- IRPF
- Impuesto sobre el Patrimonio
- Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y sobre Transmisiones Patrimoniales
Además de los usos fiscales de los datos catastrales, existen otros usos como:
- Jurídicos: Protección del mercado inmobiliario, impidiendo la compra o la venta de fincas inexistentes o de características distintas a las reales y da certeza y transparencia al mercado inmobiliario.
- Políticas públicas: los datos catastrales se usan para establecer la capacidad económica en procedimientos de concesión de diversas ayudas públicas como acceso a vivienda protegida, becas de estudios, ayudas de comedores sociales, acceso a residencias para la tercera edad, etc.